Mi Ángel

Tan solo tenia 10 años de edad
y me regalaron un ángel.

Era el ángel mas bonito del cielo
una obra de arte de valor incalculable,
un tesoro de precio cero.

Me pase la niñez esperando ese regalo.
Ni los Reyes Magos, ni el Ratoncito Pérez,
ni Santa Claus me lo acertaron.

Fue una llamada a media noche la que confirmo,
que aquel 4 de abril,
una ofrenda de los Dioses corrió hasta mi...

La mas linda imagen que nunca vi,
los ojos mas bonitos que nunca me miraron,
de un azul intenso como el mar,
de un brillar diamante...
El diamante mas bello que regalar.

Era sin duda el,
era mi ángel tan esperado.

Las noches son mas cortas
cuando las paso observándolo mientras duerme.
Cuando paso las yemas de mis dedos
por su espaldita desnuda,
cuando recorro con mis manos
el borde de su naricita redonda y perfecta...

Cuando ríe como un mayor
y no cabe tanta belleza en algo tan pequeño.
Cuando caemos de culo al suelo entre carcajadas
y el libera un suspiro en forma de “Aysssss” por cada algazara...
O cuando corre hasta mi con los abrazos abiertos
y pronuncia mi nombre en el lenguaje que solo el entiende,
bueno, que los dos entendemos...

Su presencia es puro elixir de la vida
que se bebe con mirarlo,
con mirar los ojos mas bonitos que nunca me miraron...
Son los ojos de mi ángel, que un 4 de abril los Dioses me brindaron.